Con pocos datos objetivos en los que apoyarme, dejándome guiar por la intuición, hoy quiero ser malpensado -piensa mal y acertarás, decía el viejo adagio- y tratar de responder a la pregunta del título diciendo: sí, es la única respuesta posible.
Repasemos los acontecimientos de los últimos meses.
El primero, está en la prensa fue el ataque del Deustche Bank a la deuda española que nos puso al borde del precipicio, después se vio, comprobó y existen pruebas, de que este fue realizado sobre falsedades de la fortaleza del sistema económico y financiero español (ver hemerotecas).
Segundo, resulta curioso, cuando menos, que los países que han sufrido con mayor virulencia los ataques de las agencias de calificación, el FMI,... son España, Grecia y Portugal, el denominador común es que los tres tienen gobiernos de izquierdas. Sin embargo, Italia, con una deuda que duplica o triplica la de España ni un sólo reparo de los "mercados". Otrosí: la deuda española es muy inferior a la media de los paises de la UE, lo que, en lógica racionalista, debería ser positivo y valorado, pero ¿que voy a explicar que no sepáis?.
Tercero, recordad el inicio de la crisis y la postura firme del gobierno de Zapatero y su firme defensa de los derechos sociales, de mantener la inversión pública en infraestructuras, I+D, educación. desempleo,... A ello hay que sumarle, su llamada a establecer normas y regulación de los mercados financieros y su intento de alumbrar un nuevo sistema económico sostenible social, medioambiental y económicamente -La ley de Economía Sostenible que apostaba por un nuevo modelo económico basado en los principios de la sociedad del conocimiento y del Estado del Bienestar-.
Todo ello se produce en un contexto de descalificaciones personales y políticas de Zapatero. La mera observación de la actitud del PP (vocero de la CEOE y adalid del neoliberalismo mas virulento -leed lo que publica la FAES, bueno, mejor no lo hagáis para no cabrearos- y el análisis superficial y el extendido por la extrema derecha mediática coinciden en presentar a un Zapatero sin criterio, cambiante de opinión... Y yo, permitidme que sea malpensado nuevamente, creo que Zapatero se ha encontrado sólo frente a esos mercados omnipotentes y es víctima de su chantaje. Se ha visto obligado a aceptar lo que siempre había combatido: desregulación económica y laboral, adelgazamiento del Estado del Bienestar, archivo de la Ley de Economía Sostenible,...
¿Cómo lo han conseguido? Rebajando la calificación económica de la deuda española -ya he explicado que no es la más alta, ni la que presenta mayores riesgos por su volumen-; aumentado los intereses que España tiene que pagar por la emisión de deuda (son superiores a las prestaciones por desempleo, por ejemplo) y realizando previsiones económicas catastróficas sin más argumento que su percepción de la realidad, es decir, de sus intereses.
Estas son algunas de las ideas que me llevan a creer que existe esa conspiración de los mercados, no contra España, sino contra Zapatero. Lo que no se me ocurre es como un pequeño David puede luchar contre ese Goliat de la avaricia y la codicia que son los mercados sin ser un nuevo Chaves -algo inimaginable e indeseable-, pero algo habrá que hacer.
Acabaré con un aviso a navegantes. Las políticas neoliberales, las que nos están imponiendo no son la solución. Sólo hay que mirar a Irlanda y ver como este país que hasta hace unos meses era el ejemplo de los neoliberales ha pasado de las tasas más altas de "crecimiento económico" a una situación de total bancarrota y, evidentemente obvio, mi opinión sobre los sistemas de China, India,...paraísos del capitalismo salvaje y de la miseria más atroz.
1 comentario:
Ayer se publicó durante unas horas un anónimo en el Financial Times (traducido al castellano en http://www.libertaddigital.com/economia/un-informe-denuncia-que-el-gobierno-oculta-una-caida-real-del-pib-del-14-1276403131/). Este anónimo siembra aun más dudas sobre las cuentas públicas españolas. Si no se ha dado más relevancia al artículo es porque a la derecha no le interesa, y al gobierno evidentemente tampoco. La sombra de Grecia es demasiado alargada.
La situación española muestra una preocupante deriva respecto los argumentos del gasto público. Los primeros en recibir son los funcionarios, los servicios públicos y las ayudas a los más vulnerables. SIn embargo, el principal problema de la ineficiencia del sector público (los excesos, la red de autovías de imposible mantenimiento,el AVE que conecta Madrid con cualquier capital de provincia, los aeropuertos regionales construidos por populismo) por ahora no parecen entrar entre los temas a privatizar, siendo algunos de ellos una carga que no beneficia al ciudadano. El resultado es síntoma de seguir lo que otros dictan, no hay margen para la innovación. Qué alternativa tiene la izquierda? Qué modelo quiere la clase media? Quién se ocupa de las PIMES y su financiación, que son los que van a permitir volver a crear trabajo, aunque sea poco?
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